Hace
tiempo, escribí sobre mi experiencia dando “Abrazos Gratis en MIT”. Fue
realmente increíble y enriquecedora ya que generé una conexión con cada una de
las personas desconocidas a las que abrazaba.
La
semana pasada estaba paseando por New York con unos amigos y al pasar por un parque
encontramos 6 personas con carteles que decían “Consejos por 25 centavos”. Nos
intrigó mucho, así que nos acercamos.
Nos
dijeron “Pensamos que al no estar involucrados, podemos darte una visión objetiva
que te puede ayudar”. No me di cuenta de preguntarles por qué lo hacían o cómo
se les había ocurrido, pero me pareció GENIAL!
Creo que con sentarse a escuchar a extraños y solo haciéndoles preguntas, se los puede
ayudar muchísimo. Mi experiencia me enseñó que nos abrimos mucho más con
extraños que con gente que conocemos. Aunque éstos puedan tener la mejor
intención y los querramos muchísimo, a veces podemos tener reparos a realmente abrir nuestro corazón por miedo que nos juzguen, no queremos compartir
intimidades o pueden tener intereses involucrados. Preguntas simples como ¿Cuál
es tu objetivo? ¿Por qué hacés eso, por qué, por qué, por qué? ¿Qué sentís?
¿Qué crees que siente la otra persona?, contestadas con el corazón, pueden
hacer una gran diferencia.
En mi caso, mientras paseábamos veníamos tratando de que yo tomara una decisión con la lógica de un consultor. Cuando les pregunté a ellos, me dijeron "Parece que ya tomaste la decisión, solo te asusta implementarla" y creo que tuvieron razón.
La
verdad es que me encantaría experimentar la parte de sentarme a escuchar a la gente… A ver si convenzo a alguna amiga a
que me acompañe, ya que confieso que soy muy tímida y sola no me animo! Los
mantengo al tanto :-)
PS. Y si alguno de ustedes se anima, escríbanme!
PS. Y si alguno de ustedes se anima, escríbanme!